La semana pasada participé en la categoría de poesía en el XXIV Certamen Literario de El Ejido
(Almería) con un poema muy especial. Escrito en una época donde
pujaban felicidad y tristeza por hacerse dueñas de mi cabeza. Sin más os dejo con él.
Poema: Locura & Cordura.
No sirven mis alas si no hay
quién las sostengan.
No creo en dios si no lo
ordena el Diablo, ¡vengan!
No tengo mentiras, mas sí a
quienes engañan.
No acepto la piedad que me
dan mis entrañas.
La verdad atrapada en propias telarañas
construidas cada una por todas mis hazañas.
Sin creer en mí mantengo el falso silencio
de sentimientos fútiles, mas ya renuncio
a aquello que obtuve por
pensamientos necios,
que no supe controlar porque
eran perversos.
Bajé de la nube y supe volar
entre ellos,
alejándolos de mi veraz
universo.
Acércale un folio al alma de color niste.
Escucho gritos de un público que no existe
y lamentos por cada uno de mis despistes.
En mi memoria: los besos que no me diste.
Sin ser infame dejo de ser
insistente,
mas qué decir a las locuras
de la mente
si finales me urden en viejo
de repente,
aunque me intento camuflar
entre la gente.
Lloro aire, usé todas mis apenadas lágrimas
en la infancia funesta, aunque no fue traumática
guardo las sabanas que secaban mis ojos,
tan empapados por baladíes enojos.
Sin alegorías, no canto a la
alegría,
sin despojos, cantaré a la
melancolía.
A lo único que ahora tengo,
señoría.
Respondo a una agonía, pero
es la mía,
que la quiero y que odio, somos una simbiosis
sin ni una derrota, la eterna apoteosis
de lujuria, es ella la que me da mi dosis
y me hace mantenerme entre lo humano o fósil.
Déjenme ir al país en el que
yo era niño
para serlo siempre, he
cumplido el gran descuido
de ser otro adulto en este
mundo ficticio,
o rehúso y seré un prófugo
perseguido.