Este
poema heptadecasílabo (17 sílabas por verso) es una llamada al
disfrute de la vida en su plenitud. Subidas y bajadas… pero al final todo se
resumen en una vida.
Levanta la mirada.
Llega
un punto de nuestra vida que nada tiene importancia
luchas
por la salud de tu familia, no importa que digan.
He
visto luchar a lobos fieros en cualquier circunstancia
y
abrazos entre malos hermanos, aunque no se lo pidan.
A
veces lo damos todo por dado y nos falta el candado
que
une a las personas y separa el daño que hemos causado.
Haré
caso a quién está conmigo, compartió los obstáculos,
anduvo
por mis caminos y provocó en mí mil estímulos.
Soy
de los que nunca pierden, puesto que soy de los que insisten,
de
los que no importa cuánto caigan, sino cuánto resisten.
He
disfrutado sonrisas y de mis momentos más tristes
No
le des más vueltas a la vida, pues se va en un despiste.
¿Ves
el futuro gris? No planeo, vivo un presente mágico:
tarareo
canciones divisando todas mis opciones:
vivir
entre cartones y no mentir por bienes metálicos.
No
podemos dejar que los ladrones pinten corazones.
Estribillo:
Levanta
la mirada, mira, ves el regalo, es la vida.
Cada
intento de joderla siempre nos fatiga y castiga.
La
prensa atosiga; la música te da lo que le pidas,
ella
tiene infinitas alternativas, alternativas.
Levanta
la mirada, mira el regalo que es nuestra vida.
Porque,
aunque tu vengas de donde vengas, ibas a donde ibas,
y
digan lo que digan, sigan, ¡Sigan! Y siempre hacia arriba.
Ella
tiene infinitas alternativas, alternativas.
Levanta
la mirada, mira, ves el regalo, es la vida.
Parques
llenos de sonrisas, de niños que juegan sin prisas,
de
besos y abrazos por allá por donde quiera que pisas
parejas
caminan, felicidad es la única premisa.
La
negatividad está construida por automatismos,
repetimos
cientos de patrones sin ser nosotros mismos.
Nuestros
llantos y nuestros gritos nos provocan cataclismos:
nos
hacen ver paisajes como si fuesen grandes abismos.
Nunca
tendremos dudas si tenemos las cosas bien claras.
Lámparas
disfrazadas quitan la obscuridad de la cara.
Palabras
fotografían, son cámaras esperanzadas
por
atrapar el mejor instante: personas abrazadas.
Primavera
en el ambiente por bienestar en el semblante.
flores
sonrientes en una sociedad donde no hay personas,
son
seres de diferentes zonas convertidos en gente
que
están caminando en prados verdes siempre que están a solas.
Estribillo:
Levanta
la mirada, mira, ves el regalo, es la vida.
Cada
intento de joderla siempre nos fatiga y castiga
la
prensa atosiga; la música te da lo que le pidas,
ella
tiene infinitas alternativas, alternativas
Levanta
la mirada, mira el regalo que es nuestra vida.
Porque,
aunque tu vengas de donde vengas, ibas a donde ibas,
y
digan lo que digan, sigan, ¡Sigan! Y siempre hacia arriba.
Ella
tiene infinitas alternativas, alternativas.
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